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Bogotá D.C., diciembre 9 de 2022. Desde diciembre de 1948, el 10 de este mes, se conmemora el Día Internacional de los Derechos Humanos, como el hito histórico de proclamación de los Derechos Humanos que son indivisibles, inalienables y universales para todas las personas sin distinción de sexo, género, raza, etnia, clase, condición de discapacidad, nacionalidad, posición política o socioeconómica, entre otras. Estos derechos son un ideal común de los pueblos y naciones quienes, a su vez, deben promoverlos, enseñarlos y respetarlos junto con las libertades, asegurando su garantía para todas las personas. 

El reconocimiento de derechos como la vida, dignidad, libertad y seguridad, también debe incluir el de derechos humanos fundamentales como los derechos sexuales y los derechos reproductivos, y el poder de decisión y agencia que tienen todas las personas para tomar decisiones autónomas, libres e informadas frente a aspectos fundamentales de sus vidas. Las personas tienen el derecho a decidir libremente sobre tener o no hijas/os, acceder a métodos de anticoncepción modernos, a educación integral en sexualidad, expresar libremente la orientación sexual y/o identidad de género, y vivir una vida libre de violencias. 

Si bien estos derechos se encuentran previstos en diversos instrumentos internacionales, su reconocimiento y plena garantía han sido vulneradas y constantemente puestas en riesgo. Estos riesgos se han incrementado en situaciones de crisis humanitaria y guerras, contextos políticos adversos, conflictos internos y en general, por la desigualdad social, política y económica. Adicionalmente, las violaciones a los derechos humanos se profundizan para aquellas personas que han estado constantemente en mayor vulnerabilidad como las niñas, niños, adolescentes, jóvenes, mujeres y personas con discapacidad y/o con identidades de género y orientaciones sexuales diversas. 

Todos los derechos están interrelacionados, lo que implica que las vulneraciones no son aisladas; así mismo deben ser garantizados para fortalecer el respeto de la dignidad humana y para alcanzar un desarrollo sostenible sin dejar a nadie atrás, promesa establecida por la mayoría de países en el 2015. Con este fin, se debe priorizar el cierre de las brechas existentes, el reconocimiento de la diversidad, la igualdad de género y el pleno ejercicio de las autonomías.  

El Fondo de Población de las Naciones Unidas - UNFPA, se manifiesta sobre la necesidad de incrementar los esfuerzos para que los países garanticen los derechos humanos, incluidos los derechos sexuales y reproductivos, de todas y todos sus habitantes. Lo anterior, reconociendo las diversidades de género, étnicas, de raza y discapacidad, entre otras, para desarrollar acciones afirmativas, políticas públicas, programas efectivos y la destinación de mayores recursos para lograr la igualdad. 

Por su parte, UNFPA continuará los esfuerzos por lograr que todo embarazo sea deseado, cada parto sea seguro y que cada persona joven alcance su pleno desarrollo, como requisito fundamental para garantizar los derechos humanos de todas las personas, especialmente de las niñas, adolescentes y mujeres en Colombia.