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En una estrategia de doble vía, contribuimos a adecuar la respuesta de las instituciones a las necesidades y los derechos de la población joven, e impulsamos la participación activa de los grupos, organizaciones y redes juveniles en el desarrollo nacional y local

El UNFPA trabaja de la mano de instituciones del gobierno y de organizaciones sociales de jóvenes, para avanzar en la garantía de los derechos juveniles, en las siguientes áreas:

  • Contribución de jóvenes a las agendas de desarrollo local, nacional y mundial, a partir de procesos de formación política y del apoyo técnico y financiero necesarios para su participación.
  • Acompañamiento a la construcción de políticas públicas de juventud, a nivel departamental y municipal.
  • Acompañamiento al Ministerio de Educación en el diseño e implementación del Programa Nacional de Educación para la Sexualidad y Construcción de Ciudadanía en instituciones educativas.
  • Apoyo al Ministerio de Salud en el diseño e implementación de servicios de salud amigables para adolescentes y jóvenes.
  • Formación y fortalecimiento de organizaciones sociales en temas relacionados con los derechos, y la salud sexual y reproductiva.
  •  Procesos de formación en prevención de VIH/Sida y otras infecciones de trasmisión sexual a jóvenes desde un enfoque diferencial, vinculando a jóvenes LGBTI, afrodescendientes y mujeres indígenas.
  • Gestión de información sobre jóvenes para apoyar la toma de decisiones de política pública.

Principales acciones

Buena parte de las acciones del UNFPA se dirigen a acompañar al Ministerio de Salud y Protección Social en el proceso de expansión – y a la vez a la evaluación – del modelo de Servicios de Salud Amigables para Adolescentes y Jóvenes (SSAAJ), que cuenta con cerca de 900 servicios funcionando en el país.

En el 83% de los 192 municipios priorizados por el CONPES 147 del 2012, se realizaron, durante los últimos 3 años, acciones intersectoriales de prevención del embarazo adolescente con el esfuerzo conjunto de varios sectores: salud, educación, protección, cultura, entre otros. UNFPA acompañó una estrategia de abogacía y diálogo político en los 150 municipios de más alta prevalencia de embarazo adolescente del país, incidiendo en la elaboración de planes locales para su reducción.

Adicionalmente, se apoyó la puesta en marcha del Observatorio Nacional de Embarazo en Adolescentes, liderado por el Ministerio de Salud pero cuyo carácter intersectorial permite recoger información producida por el ICBF, el Ministerio de Educación, el DANE y otras entidades públicas. Esta iniciativa alimenta la toma de decisiones con información e indicadores monitoreados, pertinentes para la orientación de políticas, estrategias y recursos dirigidos a la salud y el desarrollo de adolescentes.

Dado el incremento de embarazo y muerte materna en las menores de 15 años y teniendo en cuenta sus particulares condiciones biológicas, económicas, culturales y sociales, el UNFPA ha apoyado al Ministerio de Salud en el diseño y en la socialización de un protocolo de atención diferenciada para ellas, que contempla asesoría psicológica, social y en derechos, y atención clínica preferencial y de pos-parto integral.

El UNFPA trabaja, adicionalmente, con grupos de veedurías sociales juveniles a través de los cuales los y las adolescentes monitorean la calidad y accesibilidad de los servicios de salud, y aportan propuestas para su mejoramiento, a partir del aumento de las capacidades de interlocución entre los jóvenes y las instituciones del Estado responsables de generar políticas, programas o servicios para garantizar sus derechos sexuales y reproductivos.