Para Claudia facilitar información a adolescentes y jóvenes mujeres sobre sus derechos sexuales y derechos reproductivos, va más allá de la mera instrucción sobre el sexo, se trata de una lucha por la igualdad de género, la dignidad y la autonomía.

 Su lucha tiene un origen propio. Un embarazo inesperado a los 18 años, producto de la falta de acceso a métodos de anticoncepción y educación sexual, cambió el curso de su vida, y aunque su hijo Keiver es uno de sus grandes amores, también es consciente de que las cosas podrían haber sido diferentes si hubiera tenido más opciones.

 La visión de esta trabajadora social de profesión es clara: un futuro para las mujeres de su territorio libre de ataduras morales, donde la libertad sobre sus cuerpos, su sexualidad y su vida sea la bandera. 

 Con su carácter firme, valiente y perseverante, Claudia Paola continúa su travesía por las calles y veredas de su natal Tumaco, desafiando mitos y prejuicios arraigados en las mujeres. Les recuerda que no necesitan permiso para decidir sobre su sexualidad, que su cuerpo les pertenece, que son dueñas de su futuro y que tienen total libertad y derecho a SER, sin miedo.