Hace 17 años, Jenny Carolina llegó a la puerta de oro de la Amazonía colombiana para echar raíces. Unas raíces que, con un pasado marcado por la lucha por el empoderamiento femenino, ha teñido su presente de los colores verde y violeta que hoy definen su futuro y el de muchas mujeres jóvenes de su comunidad, donde florece la resiliencia y la defensa por los derechos sexuales y derechos reproductivos.
Como estudiante de psicología y miembro del colectivo ‘Polas Violetas’, Jenny Carolina inspira a otras mujeres jóvenes a evidenciar su poder, siendo su propio viaje de sanación y amor propio la brújula con la que contribuye en el camino hacia la libertad plena de las mujeres. Esta tarea no ha sido fácil, pero para esta joven lideresa, todo esfuerzo vale la pena cuando se trata de apostarle al sueño de vivir en un mundo donde las mujeres y las niñas sean libres de ser quienes desean ser, sin miedo ni limitaciones impuestas por prejuicios.
Jenny participa de un proceso de formación, liderado por UNFPA Colombia que inició con jóvenes de Florencia, Caquetá, y que tiene como objetivo generar reflexiones sobre la importancia de la Educación integral en Sexualidad (EIS) como un derecho humano y sobre su relación con la construcción de paz en el territorio. En este espacio ha podido fortalecer sus conocimientos para poder llevar este mensaje a otras mujeres jóvenes de su comunidad.
En Jenny Carolina, la valentía resuena en cada palabra que pronuncia y en cada acción que emprende. Una celebración a la poderosa fuerza inquebrantable que habita en el interior de cada mujer.