En situaciones de crisis humanitaria, las niñas, jóvenes y mujeres adultas tienen un mayor riesgo de sufrir violencias basadas en género (VBG), además de no poder ejercer sus derechos sexuales y reproductivos. El Fondo de Población de las Naciones Unidas –UNFPA, con su Área de Respuesta Humanitaria, trabaja CON TODOS LOS SENTIDOS por las mujeres, adolescentes y jóvenes EN LA RESPUESTA HUMANITARIA. La agencia acompaña, apoya, informa, brinda espacios seguros y reconoce las voces de las mujeres que se encuentran en contextos de crisis y emergencia humanitaria.
Con este propósito, conoceremos tres mujeres valientes que decidieron transformar su realidad, ellas nos cuentan su historia, el trasegar hacia un proyecto de vida colectivo donde las fronteras, su vida, sus cuerpos y territorios estén libres de violencias.
MARLYING
Todas para una y una para todas
En medio de las crisis surgen poderosas experiencias de mujeres que enseñan con su ejemplo a superar la adversidad. Es el caso de Marlyng Varguillas, una migrante venezolana de 35 años que convirtió cada problema en una oportunidad, cada aprendizaje individual en práctica colectiva, cada logro material en goce social. Para ella hay un antes y un después de participar en los programas que tiene el Fondo de Población de Naciones Unidas en la frontera colombo – venezolana. ¡Quiero conocer la historia de Marlying!
JULIANA
Un futuro promisorio
Juliana Ballesteros Rincón es una joven que inspira, ella está en el colegio, pero desde ya tiene claro qué quiere hacer en su futuro. Con el apoyo de UNFPA, esta colombo- venezolana tiene hoy un proyecto de vida claro, ella quiere abrazar el mundo, ha aprendido a amarse cada vez más y a dar lo mejor de sí para alcanzar sus metas. ¡Quiero conocer la historia de Juliana!
GRISEIDA
Hasta el fin del mundo por las mujeres
El día que Griseida supo que podía detener el maltrato que había vivido, no solo empezó a amarse más, sino que quiso que ese sentimiento amor y libertad, también lo experimentaran otras mujeres. Grisedia tiene 28 años, nació en Venezuela. Es una mujer migrante, madre de cinco hijos, y como ella lo dice con voz dulce pero firme, también es una lideresa, le gusta que le digan la flaca porque así la llamaron sus primeras amigas en Colombia. ¡Quiero conocer la historia de Griseida!